miércoles, 16 de abril de 2014

Carmen Amoraga: "Tenemos que asumir la pérdida como una parte de la vida"

La muerte fulminante de su marido deja a Giuliana devastada. El amor y la pérdida es el tema de La vida era eso, premio Nadal de Novela 2014. Carmen Amoraga (Picanya, Valencia, 1969) también fue finalista del Premio Planeta 2010 con El tiempo mientras tanto. Con su primera novela, Para que nada se pierda, obtuvo el II Premio de Novela Ateneo Joven de Sevilla y, con Algo tan parecido al amor, fue finalista del Premio Nadal 2007.

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FOTO: Miguel Ángel León

- La vida era eso. ¿Qué exactamente?

- Pues la vida es una pérdida. Desde que nacemos estamos perdiendo cosas. Y tenemos que asumir la pérdida como parte de la vida. Porque en esa misma pérdida está la riqueza.

- Escribe como haciendo fotografías. ¿Tan claro lo tiene?

- Sí. Mis novelas son como fotografías del mundo que veo y del mundo que me ve. Más que una fotografía es un espejo.

- En esta, como en otras novelas, sus protagonistas son mujeres. ¿La propia realidad demanda voces femeninas?

- Me preocupa más la paridad en los personajes de mis novelas que si estuviera haciendo una lista electoral (ríe).

- Su novela indaga en cómo las redes han cambiado la comunicación humana. ¿Tan solos estábamos?

- No. No estábamos solos, pero tenemos una nueva herramienta de comunicación que multiplica el efecto del mensaje. Las redes han revolucionado nuestra forma de comunicarnos. No estábamos solos, pero ahora es mucho más fácil.

- Twitter le pareció el Washington Post y después Sálvame. ¿Dónde está el peligro?

- El peligro en Twitter está en que deja demasiado espacio para la impunidad y a veces la impunidad de las opiniones roza el insulto.

- Su novela se inspira en la vivencia de una amiga que sufrió la pérdida de su marido. ¿Qué queda después de una pérdida insustituible?

- Queda aprender a perder para aprender a vivir.

- Usted es valenciana y periodista. ¿Cómo vivió la desaparición de Canal Nou?

- Con una tristeza infinita, pero más por valenciana que como periodista. Porque el cierre de Canal Nou ha sido un robo a los valencianos como sociedad.

- Su libro es también un homenaje a Diario de Ana Frank. ¿Tanto le impactó?

- Ese libro me impactó como lectora porque lo leí muy joven y porque fue la primera vez que fui consciente de hasta qué punto contar lo que te pasa alivia. Al margen de lo que ocurre luego con lo que tú has contado. Con todas las distancias, Giuliana escribe su propio diario, tal como hizo Ana Frank.

- Recibió el Premio Nadal de manos de Ana María Matute, todo un símbolo para la mujer escritora.

- Sí. Ana María Matute representa el triunfo de la mujer escritora en un mundo en el que la mujer tenía todas las de perder.

- Decía usted: “Aprender a perder es aprender a vivir”. Así de fácil y así de difícil.

- Así de fácil y así de difícil. De la misma manera que correr no es lo mismo que andar, pero para correr tienes que aprender a andar.

- Se presenta a premios para conseguir “un informe de los lectores”. ¿Le interesa la opinión de los otros?

- Cinco personas consideraron que esta novela merecía el Premio Nadal, pero desde que la novela está en la calle miles de personas pueden pensar que lo merece o no.

- Se define como inconstante y dispersa, por lo que necesita ponerse metas. ¿Cuál es la próxima?

- La próxima meta es difusa. Seguir haciendo algo que me hace feliz y ser capaz de hacerlo lo mejor que pueda, que es escribir.

(Publicado en el diario Córdoba el 15 de marzo de 2014)

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